Dos nuevas consideraciones acerca de la muerte
La muerte tiene luz particular
Aleqs Garrigóz
El cazador y el ciervo son gemelos.
A ambos ambiciona dicha secreta,
culpable por sí misma,
entronada en espumas sin consuelo,
sacrificadas al vuelo de un planeta.
El que se avecina en medio del ritual arcaico
busca una voz hueca,
la resonancia presentida de un futuro
que es el almohadón de la tumba
-la resonancia de una tumba.
Allí el brillo lascivo,
indescifrable, de los tesoros inauditos;
sapiencia milenaria
que nadie conoce;
concavidad perfecta
que sostiene un orbe cerrado:
un fuego que arde para todos
y no conoce multiplicidad más que en la extensión,
y es abarcable sólo en el sueño;
como la materia misma de la luz que vivifica su agonía,
miente su presencia
y todo ciñe, todo colma
con dedos finísimos.
La muerte tiene lenguaje propio, escurridizo,
hecho de escarchas impostergables
y reinos indelebles:
un llanto en catarata
cayendo sobre la era cósmica.
Todo lo que crece obedece a la muerte
Aleqs Garrigóz
El ojo no es sino
para ver algún nuevo cadáver:
la naturaleza se celebra a través de la destrucción.
Y en medio de todo eso:
el pétalo erguido, esplendor de un día,
esas pestañas abatidas por rayos de sol
que en el difícil respiro
no agonizan: anhelan la muerte.
Todo lo que crece llama desde el polvo
su retorno, su imposible mano alzada.
Como un fruto sumiso,
que sólo entre las manos de la nada está a gusto:
como espacio atravesado por la ausencia
que ríe con los dientes del enemigo.
Oh, el que es inocente no lo es en vano.
La maduración es para extinguirse.
Y el que escaparía
es sólo la pluma alucinada
de un petirrojo
abandonado en la nieve.

Aleqs Garrigóz (México)- His poems have been published in various national, Latin American and Spanish magazines and online media. Some of his published books of poetry are: La promesa de un poeta (Humo, 2005), Páginas que caen (La Rana, 2013) and Los hermosos ausentes (Los otros libros, 2016).